Complejidad Algorítmica y Notación Big O: Guía Fácil para Principiantes
¿Confundido con la notación Big O? Aprende qué es la complejidad algorítmica, cómo afecta tus programas y por qué es clave para escribir código eficiente, explicado fácil y sin tecnicismos.

¿Qué es la complejidad algorítmica?
La guía definitiva para no entrar en pánico cuando empieces a ver Big O en clase
Si estás iniciando tu camino en la programación, seguramente te hayas topado con palabras como “complejidad algorítmica” o “notación Big O”, y te preguntes: “¿Esto realmente me sirve para programar?”. Tranquilo, a todos nos ha pasado por la cabeza.
La realidad es que entender la complejidad algorítmica te ayuda a escribir código más inteligente y eficiente. No se trata solo de que el programa funcione, sino de que funcione rápido y bien, especialmente cuando crece la cantidad de datos que procesas.
¿Por qué deberías preocuparte por esto desde ya?
Imagina dos programas que hacen exactamente lo mismo, pero uno tarda 1 segundo y el otro 1 minuto. La diferencia no siempre está en el lenguaje de programación o la velocidad del procesador: a menudo está en el algoritmo y su complejidad.
- En proyectos reales: Cuando manejes grandes volúmenes de datos, optimizar tu lógica marcará la diferencia.
- En entrevistas técnicas: Las empresas valoran que sepas analizar la eficiencia de tus soluciones.
- En exámenes y tareas: Conocer cómo se mide el rendimiento de tus algoritmos puede ahorrarte más de un dolor de cabeza.
Ok, pero… ¿qué es realmente la complejidad algorítmica?
La complejidad es una forma de medir cuánto "trabajo" necesita tu algoritmo para resolver un problema, en función del tamaño de la entrada (input). Usamos la notación Big O para describir de forma general esta complejidad. Hay dos tipos frecuentes:
- Complejidad temporal: Mide cuánto tiempo tarda el algoritmo en terminar.